Famila

Hay muchas cosas que me preocupan pero una de las que más me alteran ya de por si mi alterada vida es mi relación con mi familia. Discutimos todos los días y por las causas más absurdas. Pero mi vida y mi relación con mis padres no es muy distinta a la que viven muchas personas con las que me relaciono, algunas de estas historias las conozco porque he sido un observador involuntario y otras porque simplemente me las han contado. Existe una gran crisis generacional y eso sale a la luz diariamente con peleas, con gritos y con discusiones. En cada caso se vive de una forma diferente y las relaciones son distintas, pero en el fondo hay algo que nos une y es precisamente esa desunión. Cuando hace algo más de un mes estuve de vacaciones estaba muy tranquilo y relajado, casi en paz y en parte me sentía libre por no tener la presión constante y agobiante de mi familia. Me siento como en una de esas películas en las que el protagonista sufre todo tipo de desventuras, aunque yo no soy ningún heroe y mi vida tampoco es tan trágica ya que procuro lo más posible tomarme las cosas con más calma. No hay problema que no tenga solución pero no siempre somos capaces de encontrarla y eso se ve muy facilmente cuando somos más capaces de ayudar a los demás en los mismos problemas que podemos tener nosotros. Creo que en muchas ocasiones no vemos cómo resolver las crisis porque no nos planteamos los problemas desde un punto de vista más objetivo. Quizás lo que digo tampoco tenga mucho sentido, pero hoy tampoco es que sea mi mejor día.
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Psicología de la familia